ALTERNATIVAS PARA UNA DUCHA SANA Y ECOLÓGICA
¿Por qué rodearnos de tanto plástico en nuestra vida cotidiana?¿Existen alternativas más sanas y ecológicas?
Quizás sea el baño el lugar de la casa donde más envases y botes acumulemos. Productos de higiene personal, artículos de belleza, cosméticos, el botiquín de primeros auxilios o incluso medicinas.
Y la gran mayoría son de plástico.
Como el abanico es tan amplio, hoy queremos centrarnos en la ducha. La lista de accesorios a la hora de ducharse es rica y variada: esponjas de fibras artificiales, o naturales, pero rellenas de poliéster; juguetes infantiles de pvc o poliuretano; o limas pedicuro, piedras pómez y exfoliantes sintéticos.
Y qué decir de la infinidad de productos químicos que utilizamos para asearnos. ¿Realmente necesitamos tantos tipos de champús, geles, acondicionadores o sales de baño? Desde Sinplástico, queremos compartir una serie de gestos simples para reducir la mayoría de los plásticos que nos rodean a la hora de ducharnos. Para el cuerpo: Usar pastillas de jabón que contengan aceites vegetales ecológicos, y aceites esenciales en vez de fragancias artificiales.
Estos jabones son más naturales y por lo tanto más respetuosos con tu piel. Con este gesto eliminaremos los botes de plástico de los geles.
Si, además, las adquirimos a granel, evitaremos el envoltorio en el que se nos presentan muchas de estas pastillas. Utilizar manoplas de algodón o esponjas de celulosa, evitando las esponjas marinas que no dejan de ser animales.
Son el complemento ideal a las pastillas de jabón. Emplear cepillos de madera y cerdas naturales para limpiar y masajear la piel.
Se pueden usar esponjas de luffa, piedra pómez natural y guantes de sisal o yute que eliminan las pieles muertas y reactivan la circulación. Los geles exfoliantes artificiales, además de venir envasados en plástico, contienen micro-partículas de plástico que acaban contaminando los océanos. Para el baño de tus hijas e hijos, puedes sustituir los juguetes de plástico por juguetes de caucho o latex natural.
Son biodegradables y mucho más saludables, ya que no desprenden partículas nocivas en el agua. Para el cabello: Respecto a la cuestión del cuidado del cabello, queremos mencionar la tendencia “no-poo“ (no-shampoo / sin champú) que promueve su lavado sin usar ningún champú, alegando que sus químicos son dañinos y debilitan el pelo.
A cambio, proponen lavarse sólo con agua tibia o, si el pelo es muy graso, con productos naturales tales como el bicarbonato o el vinagre blanco de manzana. Pasado un tiempo breve de aclimatación, afirman, los aceites naturales del cabello se restablecen y el pelo adquiere su textura original que hace que se mantenga suave y equilibrado. Sin llegar al “no-poo”, podemos reducir nuestro impacto usando menos cantidad de jabón y lavándolo menos asiduamente.
Está demostrado que lavarse el cabello diariamente no es sano porque lo debilita y fomenta la producción excesiva de grasa capilar. Otra opción interesante para reducir nuestra huella plástica a la hora de lavarnos el pelo es elegir champús en pastillas.
Si, con todo, tu elección son los champús líquidos, elige opciones ecológicas que lleven sellos como SOIL o Ecocert que nos garantizan que contienen ingredientes naturales. Hoy día es casi imposible encontrar un producto no certificado que no lleve siliconas del tipo PEG que además de ser cancerígenas, y derivadas del petróleo, no son biodegradables. Por ello, al mezclarse con el agua que usamos en nuestra higiene diaria terminan en el mar.
Y, de ahí, a nuestra cadena alimenticia.
Ahora los dejamos disfrutar de una buena ducha cuidando vuestro cuerpo de manera saludable y ecológica.
FUENTE: http://www.ecoticias.com/
Hola! Estoy intentado cada vez utilizar menos shampoo y acondicionador, y para ello estoy intentando bajar los aceites naturales de la raíz hacia las puntas. Lo que me recomendaron es utilizar cepillos de cerdas naturales, pero no tengo ni idea cómo reemplazarlos. ¿Conocen algo que sea vegano y me ayude a reemplazar esos cepillos?
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