CONSEJOS PARA RECUPERARTE DE LA ASTENIA PRIMAVERAL
Con la llegada de la primavera tiene lugar un acontecimiento que influye de manera determinante en el organismo, el cambio de hora. Después de varios meses siguiendo unos horarios y unos hábitos concretos, llega el momento de cambiar las manillas del reloj y disfrutar más de las horas de sol. El inconveniente es que nuestro reloj interno puede notar esta variación horaria, manifestando malestar a través de diversos síntomas. Muchas personas sienten un cansancio excesivo, cambios de humor, desmotivación, falta de energía,… síntomas que nos indican que estamos pasando un episodio de Astenia Primaveral.
¿Qué es la astenia primaveral?
La astenia primaveral es un trastorno adaptativo que provoca una serie de alteraciones en el organismo como cansancio, agotamiento, somnolencia, un estado de ánimo bajo,…. Estos síntomas aparecen cuando llega el buen tiempo y pueden durar entre 10 y 20 días. Tienen mayor incidencia entre las personas de 20 a 50 años y afectan más a las mujeres que a los hombres. Con la llegada de la primavera llegan también los cambios de temperatura, el aumento de horas de sol, cambios alimentarios, … Ante esta situación, el organismo puede reaccionar para avisarnos que hay una mala adaptación del propio cuerpo a los cambios que tienen lugar con la entrada de la nueva estación.
Síntomas de la astenia primaveral
Al llegar la primavera más de la mitad de la población presenta alguno de estos síntomas asociados con la astenia:
Cansancio y somnolencia durante el día
Falta de energía
Alteraciones del sueño
Tristeza sin causa aparente
Irritabilidad o cambios del estado de ánimo
Ansiedad
Desmotivación
Pérdida del apetito
Malestar general
Cefaleas
Hipotensión arterial
Disminución de la libido o del deseo sexual
Problemas de concentración o pérdida de memoria
Falta de motivación
¿Qué podemos hacer para evitar este trastorno?
No debemos olvidarnos de que este estado de cansancio no es una enfermedad, sino que es consecuencia principalmente del cambio de hora. Por eso debemos procurar llevar una vida ordenada, con un horario regular de comidas y de sueño. A parte de esto, hay una serie de cosas que podemos hacer para ayudar a superar este trastorno:
Dieta depurativa:
En primavera, es el mejor momento del año para hacer un “reset” y depurar el cuerpo. Depurar el organismo y eliminar sustancias dañinas que hemos ido acumulando durante el invierno, es un paso crucial para disfrutar de una salud óptima. No sólo nos ayuda a despertar nuestra energía interior, sino que nos aportará ligereza, vitalidad, bienestar y buen humor.
Realizar ejercicio físico moderado y placentero:
Nos ayudará a sentirnos mejor y a descargar las tensiones acumuladas durante el día. Además, nos ayudará a combatir la ansiedad y depresión ya que se liberan 2 hormonas relacionadas con la felicidad, la dopamina y la serotonina.
Pasar más tiempo al aire libre:
Estar en contacto con la naturaleza es muy beneficioso para ayudar a la adaptación del organismo en esta época del año. Dar un paseo, tomar el sol 20 minutos cada día, practicar deporte en el exterior, tomar un zumo en una terraza, o escaparnos un fin de semana lejos de la ciudad, … son cosas que podemos hacer para que este trastorno sea más llevadero.
Estar bien hidratados:
Con el aumento de las temperaturas, sudamos más y aumenta la necesidad de estar bien hidratados. Esto evitará posibles desequilibrios hidroelectrolíticos.
Alimentación rica en productos frescos:
Las frutas y las verduras, sobre todo las de temporada, nos proporcionarán una buena dosis de vitaminas y minerales. Además, si estas las comemos en crudo, aprovecharemos aún más su aporte vitamínico.
No realizar comidas muy copiosas:
Para evitar una digestión larga y pesada que, lo único que nos dejará es agotamiento. El cuerpo estará demasiado ocupado digiriendo toda la comida y no tendrá energía suficiente para seguir con el resto de las actividades.
No abusar de los estimulantes:
El café, té, cocacola,… nos dan energía momentánea y en forma de montaña rusa. Cuando nos los tomamos nos dan el subidón de energía, pero al cabo de poco rato nos viene el bajón y volvemos a necesitar otra dosis de estimulante para mantenernos activos.
Alimentos que nos ayudan a combatir la astenia primaveral
La alimentación puede ser el aliado perfecto para ayudar a que la transición a la primavera sea más fácil y llevadera. Las carencias nutricionales pueden ocasionar estados de fatiga y apatía, por el contrario, las comidas copiosas y pesadas nos van a robar energía, con la cual cosa, no tendremos ganas de hacer nada.
Hay muchos alimentos que nos proporcionan un chute de energía o que segregan aminoácidos que favorecen a tener un mejor estado de ánimo.
Verdura de hoja verde: espinacas, rúcula, canónigos,… nos aportarán una buena cantidad de ácido fólico. Este mineral es esencial para dotar al organismo de vitalidad.
Setas: nos aportan pocas calorías y tienen un elevado poder saciante.
Aguacate: nos proporcionará una gran cantidad de vitaminas y fibra, que intervienen aumentando la sensación de saciedad y previniendo el estreñimiento.
Fresas: nos ayudan a sentirnos con más energía ya que son ricas en hierro, en vitamina C, antioxidantes y ácido fólico.
Cítricos: limón, pomelo, naranja, … nos aportarán altas dosis de vitamina C. Esto hace que nuestras defensas aumenten y nos sintamos con más energía.
Plátano: rico en triptófano, un aminoácido que nos vendrá muy bien para sentirnos mejor, ya que es uno de los mejores antidepresivos que existe. Su aporte en potasio nos ayudará a reforzar el sistema nervioso.
Frutos secos y semillas: ricos en su mayor parte en grasas saludables omega 3, que ayudan a aumentar las defensas del organismo y a prepararlo para combatir el estado de debilitamiento y cansancio.
Complementos alimenticios que ayudan a reforzar el sistema inmune
Algunos complementos alimenticios nos pueden ayudar a sobrellevar mejor los síntomas de la astenia primaveral, proporcionándonos un empujoncito extra de energía.
Maca: es una raíz vigorizante y reconstituyente que estimula el sistema inmune y ayuda a combatir los síntomas de la fatiga crónica. Disminuye el cansancio sin provocar ansiedad ni nerviosismo.
Jalea Real: tiene un efecto estimulante y tonificante. Ayuda a recuperar los niveles de actividad y a superar la apatía y aumenta la resistencia a la fatiga y al esfuerzo.
Ashwagandha (ginsen indio): contribuye al fortalecimiento vital, a estimular el sistema inmunitario y nos aporta energía.
Polen: es vigorizante y resulta muy indicado en casos de debilidad. Aporta nutrientes que ayudan a mejorar la resistencia al cansancio.
FUENTE: https://arrelsdesempre.com/consejos-para-recuperarte-de-la-astenia-primaveral/
No hay comentarios:
Publicar un comentario